Nuestros clientes son nuestra razón de existir
Al prestarles nuestros servicios, no les estamos haciendo un favor, les ofrecemos una herramienta que les ayuda a cumplir un sueño, una ilusión o a solucionar un problema. Ellos tienen cada día más opciones en el mercado para conseguir el dinero que necesitan.
En todo momento el trato que reciban de nosotros deberá de ser respetuoso, honesto y amable. El cliente nunca deberá de ser tratado de manera indiferente, grosera y/o con burla, con intolerancia y de forma displicente, sino como a nosotros mismos nos gusta ser tratados.
Todos y cada uno de nuestros clientes deben de encontrar en nosotros el servicio personalizado que merecen. Es de suma importancia entender para qué necesitan el préstamo que buscan, ayudarlos a encontrar el producto que mejor cubra sus necesidades y nunca regatearles tiempo ni atención.
Nuestros clientes deberán de encontrar en nosotros toda la información de los productos y servicios que ofrecemos. Estamos obligados con ellos a conocer a fondo lo relativo a nuestros productos a fin de servirlos bien y en el tiempo adecuado.
Invariablemente debemos de hablarles con la verdad; nunca crearles falsas expectativas de trámites, tiempos, montos, intereses, etc. El cliente que sea rechazado en su solicitud de crédito tiene derecho a saber el motivo por el cual no es posible el otorgarle el préstamo en esa ocasión y, de ser posible, deberá de encontrar en nosotros la disposición de ayudarle a resolver su situación —por supuesto, dentro de nuestras capacidades.
En todo caso debemos de asegurarnos que nuestros clientes entiendan muy claramente las condiciones del acuerdo entre ellos y Juntos Financiera. Deben saber que pueden tener la certeza de que cumpliremos con nuestros compromisos y que esperamos lo mismo de ellos.
La única obligación que nuestros clientes tienen para con Juntos Financiera es la de cumplir con el pago del préstamo que se les dio en los plazos y términos pactados.
El agradecimiento será siempre parte de nuestra obligación para con nuestros clientes y no al revés. Si un cliente ofrece un regalo a alguien en la empresa, éste podrá ser aceptado únicamente en el caso de que la dádiva no busque influir en quien recibe el presente y/o en el cumplimiento de las políticas de Juntos Financiera.
Nunca se deberá de aceptar regalos de clientes que fueron rechazados en su solicitud de crédito y/o que no han tenido tratos con nosotros con anterioridad.
Nunca se condicionará el préstamo a un cliente por razones distintas a las marcadas por Juntos Financiera en los requisitos y políticas de crédito. Ciertamente nunca se limitará por motivos personales, religiosos, de raza, apariencia, afiliaciones políticas, sociales u otras.
A fin de evitar “hacer cosas buenas que parezcan malas”, cuando algún cliente de Juntos Financiera mantenga una relación familiar o de amistad con las personas que lo atiendan, debemos de buscar que sea transferido a algún otro de nuestros colaboradores y/o hacerlo del conocimiento de Juntos Financiera.
Los mexicanos tenemos la cultura de ser agradecidos, amigables y serviciales; sin embargo, debemos de aplicar esto en el sentido correcto. Por ejemplo, si reconocemos que, con el transcurso del tiempo, la relación de cualquiera de nuestros representantes con algún cliente se transforma en una relación personal, familiar, de compadrazgo, etc., este nuevo lazo afectivo deberá de ser comunicado al jefe inmediato del representante de la empresa a fin de que se asigne el cliente a otra persona. Esto se hará con el propósito de no interferir con la empresa y sus políticas e intereses ni poner en riesgo la preferencia del cliente para con Juntos Financiera; de esa forma tampoco se vería afectada su nueva relación personal.
Cada uno de nosotros formamos parte de Juntos Financiera para cumplir una función específica; el hacerlo con profesionalismo y honradez es parte de nuestra obligación; es, además, el ingrediente fundamental de nuestra aportación al desarrollo de la empresa y al beneficio de todos los que la integramos. Habremos siempre de recordar que recibimos una compensación económica por el desarrollo de nuestro trabajo y firmamos el compromiso de comportarnos bajo éste nuestro Código de Ética; así pues, no está de más puntualizar que está estrictamente prohibido el participar con cualquiera de nuestros clientes en tandas, cajas de ahorro o venta de cualquier otro producto o servicio que no sean los de Juntos Financiera. Bajo estos parámetros, tampoco podemos promocionar empresas, servicios o eventos de terceras personas u organizaciones. Hacer esto, generaría una situación no ética que podría dañar los intereses de Juntos Financiera, a sus accionistas y/o a los integrantes del equipo de trabajo, además de que podría tener implicaciones legales.
Si cualquiera de nosotros detectara este tipo de situaciones, tendría la obligación de indicársela a su compañero de trabajo y de informársela al área de recursos humanos, así como al jefe inmediato de la persona que tenga este tipo de actividad, a toda luz no recta. El silencio, no sirve de nada a nadie y nos hace cómplices de esta situación.
Buscamos una relación larga y productiva con nuestros clientes, por lo tanto, debemos de ganarnos su lealtad para que recurran a nosotros una y otra vez. En lo que respecta los miembros de Juntos Financiera si alguno de ellos no se comporta bajo estos principios, estará sujeto a ser separado de la empresa.
Código de Ética con: